EL SECRETO DE LOS ENTRENDORES QUE HAN TRIUNFADO COMO FUTBOLISTAS
¿Qué tienen en común Pep Guardiola, Zinédine Zidane, Ronald Koeman, Mauricio Pochettino, Ole Gunnar Solskjaer, Andrea Pirlo o Sergio Conceiçao? La lista de nombres que compone esta fácil pregunta de responder podría ser infinita. Todos estos entrenadores han sido futbolistas de élite.
No cabe duda de que el mundo del fútbol tiene un aura especial dentro del mundo de los deportes. Todo lo que genera es observado al milímetro por millones de aficionados y cualquier detalle es crucial para llegar al éxito. La figura del entrenador es uno de los pilares fundamentales del fútbol y por ello todos los clubes no reparan en gastos a la hora de analizar quién ocupará el asiento privilegiado en el banquillo.
Una de las estrategias más utilizadas por los Directores Deportivos es apostar por exjugadores de élite para el puesto de entrenador. Ahora bien, ¿alguna vez os habéis preguntado cuál es la razón de esta apuesta por exjugadores de élite que encima han triunfado en el mundo del fútbol?
La autoridad como arma ante un vestuario
Gestionar un vestuario no es para nada sencillo y la autoridad aquí tiene un papel fundamental. El ego del futbolista a veces está por encima del bien común del equipo y se necesita de una figura capaz de controlar y llevar a buen cauce a las diferentes personalidades de cada jugador que compone una plantilla. Por esta razón, el aura que genera dentro del equipo el tener como entrenador a un ex gran jugador de fútbol ya es una ventaja a la hora de combatir dichos egos.
Se puede decir que lo técnico se puede aprender a base de cursos de entrenador, pero el carisma y glamour que un exjugador de élite ya tiene de su pasado como futbolista no para nada fácil de aprender por un entrenador que parte desde cero.
El entrenador del Real Madrid, Zinédine Zidane es un claro ejemplo de lo que hablamos. De hecho, una de las primeras frases que dijo tras sentarse frente a los medios por primera vez como técnico del conjunto ‘merengue’ fue: “un tercio de los jugadores te siguen por lealtad, sentido del deber y respeto a la jerarquía. Otro tercio sólo te sigue si les aportas algo -gente a la que tienes que convencer-. Y otro tercio te complicará la vida siempre”.
Partir con un tercio ya ganado gracias a esa jerarquía obtenida de un pasado exitoso como jugador ya es un éxito. Cabe recordar que la relación entrenador-jugador no es fácil y sin una buena gestión de vestuario un equipo puede tirar por la borda fácilmente toda una temporada.
El peligro de las personalidades de los jugadores
El futbolista es, para lo bueno y para lo malo, el pilar fundamental del fútbol. Todo parte del jugador, que es quien tiene la mayor responsabilidad e influencia en la confección de los equipos y en el valor del juego creado. Es decir, sin el jugador bien formado, no hay buen juego. El acierto o desacierto de los jugadores es definitivo y por ello es vital que el entrenador sepa aprovechar al máximo todas las capacidades del futbolista. Sin embargo, para exprimir todo el potencial, el futbolista tiene que ir de la mano del técnico. Y aquí las rencillas y suspicacias son mortales.
Los jugadores pueden poner a examen al entrenador, de hecho, es algo bastante normal en las primeras semanas del técnico. De esta forma, el jugador saca sus propias conclusiones de si su nuevo entrenador está cualificado para sacarles todo su potencial. Por tanto, el técnico tiene que tener una gran habilidad de persuasión, pues convencer a sus jugadores de que el esfuerzo y trabajo sobre el césped de la semana les será beneficioso para el partido del fin de semana. Para ello, el entrenador tiene que ganarse la confianza de sus jugadores. ¿Cómo? Dando ejemplo en su conducta, respeto y poder de convicción.
El carisma de un entrenador y su ventaja tras jugar en la élite
El carisma es parte fundamental de tener autoridad, y con carisma se nace. Ahora bien, el jugador crece con referentes en el mundo del fútbol y el poder ser entrenado por un ex gran jugador -al que admiró en su día- ya es un avance superlativo, incluso si ese ex gran jugador carece de carisma.
Ese avance superlativo que supone para un técnico saber jugar bien al balón funciona en dos aspectos sobre todo a destacar. El primero es que, como ya hemos mencionado, le autoriza ante los futbolistas de su plantilla y, el segundo, es que le posibilita enseñar transmitiendo su experiencia sobre el campo, la cual es una de las herramientas más potentes de aprendizaje: el enseñar ‘haciendo’.
Justo el caso opuesto a Zidane fue el de Rafa Benítez. Toda una eminencia como entrenador tras su éxito en el Valencia CF y Liverpool, pero sin pasado como gran jugador de fútbol. Esto le hizo perder a parte de sus jugadores en el Real Madrid, ya que la batalla de egos dentro del vestuario requería de un gestor diferente al del entrenador español, reconocido por sus amplios conocimientos teóricos. Cristiano Ronaldo definió la relación de los jugadores con Rafa Benítez con una frase demoledora: “Hay cosas que nadie te puede enseñar«. O las tienes o no. Él me decía como chutar el balón o como hacer el regate, y tienes que respetarlo porque es el entrenador. Pero yo pensaba diferente y contestaba con ‘vale’, porque hay cosas que no puedes tener un debate con una persona que piensa tan diferente de ti. Es preferible decir gracias y ya está”.
Así pues, es innegable que la estrategia de apostar por técnicos que ha sido grandes jugadores de fútbol es una apuesta fiable. Guardiola es el referente más grande en el fútbol de élite y quien cumple a la perfección con todos los requisitos expuestos. Ahora bien, no todo es fútbol de élite y hay figuras en los banquillos de otras categorías que gracias a su pasado están logrando grandes cosas…
Fernando Gómez Colomer y la UD SIA Benigànim
Fernando Gómez Colomer es una de las grandes leyendas del Valencia CF. El que fuera jugador del conjunto ‘ché’ atesora en su carrera con este club las envidiables cifras de 54.868 minutos en 704 partidos oficiales, donde logró 206 goles y 76 asistencias. El centrocampista, que visitó los colores de la Selección Española hasta tal punto de formar parte de la plantilla que luchó por el Mundial de Italia en 19990, es uno de los futbolistas más queridos por la afición del Valencia CF, algo que se ha ganado por méritos propios.
Méritos propios que está también ganando ahora como entrenador de la UD SIA Benigànim. El conjunto que gestiona la Academia Internacional de Fútbol de Soccer Inter-Action compite en Tercera División, con todos os jugadores sub-23 y esta temporada 2020/2021 se ha convertido en el equipo revelación del curso. El buen juego desplegado por los jóvenes jugadores de la UD SIA Benigànim está dando mucho que hablar y el proyecto de Soccer Inter-Action se está consolidando como uno de los proyectos formativos más importantes de la Comunidad Valencia y, por ende, del panorama nacional.
El secreto de esta gran temporada del conjunto de Soccer Inter-Action es la sinergia entre el técnico y sus jugadores. Todos han entendido la filosofía de juego de Fernando Gómez Colomer y todos la ponen en práctica tras los entrenamientos semanales del equipo, tanto el las instalaciones municipales de Benigànim como en el Centro de Alto Rendimiento de Soccer Inter-Action.
Para mayor importancia en la gestión de este equipo por parte del cuerpo técnico, integrando por entrenadores de la Academia Internacional de Fútbol de Soccer Inter-Action, cabe destacar la participación cada semana de los jugadores de SIA Academy en los entrenamientos de la UD SIA Bengiànim. Con la intención de dar un salto más en su formación como futbolistas, los jugadores de SIA Academy se entrenan junto a los jóvenes jugadores de la UD SIA Benigànim como premio a su esfuerzo y trabajo diario dentro del Programa Anual de Alto Rendimiento de Soccer Inter-Action.